
LA NACION, 20 DE ENERO 2106
Un innovador proyecto que va en beneficio de quienes sufren alguna discapacidad visual, desarrolló elestudiante de ingeniería comercial de la Universidad San Sebastián, Diego Cruz. La iniciativa consiste en la creación de regletas y señalética en Braille, a través de una impresora 3D.
La regleta Braille “es un instrumento que utilizan para escribir las personas con discapacidad visual.A través de una serie de puntos que se realizan, se van formando las diferentes letras del abecedario. Al escribir cada letra, éstas quedan con un relieve tangible al tacto y gracias a esto, se puede leer”, explica el joven.
El trabajo “tiene un acabado de primera calidad, además de presentar diferentes ventajas competitivas, entre las cuales está su bajo costo, logística y durabilidad. El primer paso para la creación de la regleta es diseñarlo en un software de diseño en 3D, luego esta es impresa a través de la impresora 3D, la cual cuenta con un filamento, que es un plástico moldeable que viene en rollos como cables de la luz”, añade.
Los objetivos de la iniciativa se enmarca en dos ejes, señala: “El primero, es entregar una regleta Braille de la mejor calidad posible, a personas en situación de discapacidad visual o para quienes quieran aprender este lenguaje, a un costo realista y accesible para todos”.
El estudiante apunta que “en Chile se lucra mucho con este tipo de instrumentos, que no se importa mucho y, por lo tanto, su precio está ‘inflado’ en casi un 400% del costo real”.
El segundo objetivo “es contribuir a la construcción de una sociedad más inclusiva con quienes utilizan Braille, dado que hay muy pocos lugares en Chile en los que se encuentra presente este tipo de ayuda para personas no videntes, la que a mi juicio, debería estar presente en lugares públicos y privados, como restaurantes, instituciones del gobierno, en las paredes de las calles, locomoción colectiva, malls, y otros lugares de concurrencia masiva”.
COSTO REALISTA
