
El Colegio Santa Lucía de Fundación Luz, establecimiento particular subvencionado gratuito, se especializa en la atención de niños y niñas ciegos o baja visión.
Nuestro Colegio, tiene más de 70 años de experiencia en educación especializada desde Pre Kinder y hasta 8° básico y tiene como sello la autovalencia de los alumnos, mediante la adquisición de distintas herramientas que les permitan su inclusión en lo educativo, social y, posteriormente, laboral.
En forma complementaria al Programa Nacional de Educación, nuestros alumnos reciben una formación que enfatiza la lectoescritura Braille, técnicas de Orientación y Movilidad, habilidades de la vida diaria, deportes, salidas pedagógicas, práctica sistemática de instrumentos musicales, entre otras herramientas que apoyen su desarrollo cognitivo y social.

Historia
El Colegio de Ciegos Santa Lucía nace como “Hogar de Ciegos Santa Lucía” en 1924, y es reconocido por el Ministerio de Educación en 1947, convirtiéndose en el primer colegio para ciegos de América Latina.
Tiene como objetivo fundamental atender con calidad, eficiencia y efectividad, las necesidades de educación, rehabilitación y capacitación laboral de la población ciega y con baja visión, a través de abordajes educativos y terapéuticos innovadores.
Proporciona a sus estudiantes herramientas tendientes no sólo a permitir su plena inclusión, sino además a generar cambios en la forma en que la sociedad percibe la discapacidad visual.
La enseñanza impartida permite que los alumnos sean independientes y capaces de participar e integrarse en forma activa en los diversos ámbitos de la vida familiar, social, laboral y comunitaria.
En la actualidad es un centro educacional consolidado a nivel regional y nacional, y un referente latinoamericano en educación de personas ciegas y disminuidas visuales.
“Las personas ciegas o con baja visión pueden aprender a funcionar eficientemente en el mundo, sin esperar que el mundo se adapte a ellos” (INCLUSIÓN EFECTIVA).
La condición de discapacidad se expresa no sólo desde la pérdida o disminución sensorial, sino que también en la relación de la persona con su entorno inmediato y contexto en el cual se desempeña educativa, laboral y socialmente.
Nuestra institución asume como uno de sus principales desafíos, promover el acceso de las personas con baja visión y ceguera a recursos educativos, de rehabilitación, capacitación y empleo, que les permita disminuir o anular su condición de discapacidad en los espacios que les corresponda desempeñarse. Además, se compromete a apoyar al entorno familiar y social para hacer de esta tarea una acción sustentable en el tiempo.
I
Por la senda luminosa del destino
forjaremos ideales por doquier,
nuestro escudo será la entereza
muchas vallas tendremos que vencer.
II
Junto al ritmo vacilante de las horas
de ilusiones tejeremos un ensueño,
la nostalgia da paso al optimismo
ofreciendo un porvenir ya más sereno.
III
Adelante, muchachos, adelante
nuestra meta el trabajo debe ser,
y es la escuela de ciegos que hoy anima
el futuro con ansias del saber.
IV
Nuestras voces alientan el desvelo
y orgullosos podemos ya decir,
el incierto futuro está vencido,
sólo queda la aurora por venir.
Autores:
Letra: Elsa Soto Gutiérrez
Música: Óscar Bárcena B.
Equipo Profesional
Paulina Retamales
Directora
direccion@santalucia.cl
Eliana Medina
Jefe UTP
coordinacion@santalucia.cl
Carolina Venegas
Administradora
administracion@santalucia.cl
Centro de Padres
Yesenia Novoa Paredes
Presidenta
Juana Bernal León
Secretaria
Katherine Mosquera Valdebenito
Tesorera
Autoridades Colegio Santa Lucía

Daniela Osorio
Directora

Ivy Betancur
Coordinadora UTP

Carolina Venegas
Administradora
Proyecto Educativo
Principios y Orientaciones que Sustentan Nuestro Proyecto
Considerando el desarrollo integral como vía para la participación social de los estudiantes como personas autónomas, nuestro proyecto educativo se sustenta en una determinada comprensión del ser humano, a lo que se suman algunas perspectivas, que dan forma a nuestro ejercicio técnico/metodológico en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Concepción Sistémica: Nuestro estudiante es parte de un sistema (familiar, comunitario, social entre otros) con una organización y configuración específica que orienta sus intereses, valores, actitudes, creencias, expectativas, etc. Por lo que trabajar con él, debe implicar también un trabajo con su núcleo familiar, su realidad contextual y con las posibles redes y recursos comunitarios que están a su disposición.
Modelo constructivista: El conocimiento y aprendizaje se logra como emergente de un proceso, donde el estudiante es un sujeto activo y protagonista de su propio aprendizaje. Este conocimiento, por tanto, no es una verdad revelada por el profesor, sino que un proceso en que el educador (en su rol de facilitador) y el estudiante, construyen en conjunto el conocimiento motivados por la curiosidad.
Teoría de inteligencias múltiples: Desde que se observó la no existencia de una correlación entre coeficiente intelectual medido tradicionalmente y el éxito, es que comenzamos a entender que la escuela no debe descuidar las diversas habilidades y talentos de los estudiantes, procurando entregar una formación que considere y dé importancia al desarrollo artístico, relacional, emocional, físico además de cognitivo.
Finalmente, adscribimos a un modelo pedagógico activo, que introduce la idea de un estudiante protagonista de su proceso educativo, sujeto de motivación que construye su aprendizaje, dirigido por un profesor que orienta y propone actividades desafiantes, acordes a los objetivos que se traza la institución.