Como todos los años, este 15 de octubre celebramos el Día del Bastón Blanco que simboliza la autonomía e inclusión de las personas con discapacidad visual. Fue una emotiva jornada, donde usuarios de diversas edades, autoridades, profesores, terapeutas, trabajadores y personas cercanas a la discapacidad visual nos reunimos en el Colegio Santa Lucía y Centro para Discapacidad Visual para reflexionar sobre la importancia del uso del bastón como herramienta clave para la independencia.
La actividad estuvo amenizada por tres músicos de la Orquesta Sonidos de Luz, quienes interpretaron una conmovedora versión de “Gracias a la Vida” de Violeta Parra.
Luego nuestras directoras dijeron unas palabras:
Sofía Villavicencio, nuestra directora ejecutiva dijo que:
“El bastón no es solo una herramienta de movilidad para las personas ciegas o con baja visión, sino un emblema de independencia y dignidad que visibiliza sus derechos.”
Por su parte, Alicia Albornoz directora social de Fundación Luz, destacó que:
“A través de nuestro Centro para Discapacidad Visual y el nuevo modelo de acompañamiento, seguimos entregando herramientas y fortaleciendo la autonomía de estas personas, celebrando su fortaleza y resiliencia, y abriendo caminos con bastón en mano. La inclusión empieza cuando vemos y valoramos al otro.”
El evento contó también con la participación de Pedro Goic, Director Nacional del Servicio Nacional de la Discapacidad (SENADIS), quien señaló:
“Seguiremos trabajando para generar un cambio cultural que incorpore la diversidad y la inclusión. Agradezco la invitación de Fundación Luz, quienes nos enseñan a derribar no solo barreras, sino también la forma de ver el mundo.”
José Ignacio Cuadra, encargado de vinculación con el medio de Fundación Luz, compartió su testimonio sobre cómo el bastón le ha servido para que otros lo vean y le ofrezcan ayuda para movilizarse en el metro o en la calle.
Durante la celebración realizamos un acto simbólico: estudiantes del Colegio Santa Lucía guiaron a sus profesores con los ojos vendados por los pasillos. Para finalizar, todos los asistentes soltamos globos blancos al cielo, en señal de la inclusión, autonomía y visibilidad de los derechos de las personas con discapacidad visual.
